Los sistemas de seguridad son muy importantes hoy en día para mantener a salvo el hogar. Para proteger a la familia, la seguridad es lo primero y por ello es fundamental conocer los métodos más frecuentes que utilizan los ladrones para entrar en cualquier casa.

Los sistemas que se usan habitualmente se centran en la cerradura y, más concretamente, en romper los cilindros, su extracción y la utilización de ganzúas. Los cacos tratan siempre de robar en la vivienda en la que se entre más rápido; por tanto, es fundamental contar con una cerradura que proteja suficientemente cada hogar.

Métodos hay muchos. Los más frecuentes por parte de los ladrones son llamar al cerrajero para que abra la puerta de la vivienda como si fuese propia, trabajar como falso cerrajero para copiar las llaves y venderlas a los delincuentes que luego entran en las mismas o utilizar a empleados del hogar o porteros para que faciliten las llaves. También hay cacos que alquilan una vivienda durante un mes para hacer copias de las llaves y volver meses más tarde. Durante el tiempo que alquilan la casa, aprovechan para conocer los movimientos de los vecinos, con el objetivo no solo de robar en el piso alquilado, sino también en el resto.

Otro de los métodos es usar a los trabajadores del edificio cuando se están realizando los últimos remates de la obra. Los empleados de la constructora tienen las llaves de todos los pisos, hecho que aprovechan a veces los ladrones para conseguir una copia y, más adelante, cuando ya están ocupadas las viviendas, volver para cometer el robo.

En cualquier caso, lo más frecuente es la rotura de cerraduras o la utilización de ganzúas. Por ello es mejor usar cerraduras con cilindros antirrotura que cuenten con un escudo de seguridad que sea de metal macizo.